Con motivo de la celebración del día del niño, 130 niños acudieron a las instalaciones de la Fundación Madrina para presenciar un acto de magia dentro de un bosque encantado. El lugar decorado con duendes y hadas despertaba la curiosidad de los pequeños invitados mientras miraban con atención todos los trucos que había preparado el Gran Mago Cortis.
Posteriormente, realizaron un taller artístico con la Asociación Sapito Sopita en el que pintaron lo que tenían en mente. Aprovechando la tarde soleada, todos los padres esperaban en la terraza mientras veían que sus hijos daban color al papel con sus ideas.
Después de haber degustado de una merienda muy dulce pensada en ellos, recibieron cientos de regalos.
