Monseñor Mario Iceta, Arzobispo de Burgos, acompañó a un centenar de madres vulnerables, en un taller sobre emprendimiento femenino que desarrolla la Fundación Madrina desde hace más de 5 años

Madrid, 18 de mayo de 2023.- El Arzobispo de Burgos, Monseñor Mario Iceta, impartió un taller de emprendimiento basado en valores a más de 90 madres beneficiarias de Fundación Madrina, el miércoles 17 de mayo a las 17h, en la sede de Fundación Madrina, el objetivo de estos talleres es incentivar el autoempleo como una opción laboral.

La asistencia de madres, muchas de ellas acompañadas de sus bebés, rebasó las expectativas llegando al centenar de asistentes, algunas tuvieron que esperar fuera ya que el aforo estaba completo. En este taller, Monseñor Iceta, habló sobre su vida profesional, o como el indica, sobre una vida de Vocación, y disertó sobre los valores claves ante la vida y el emprendimiento.

Asimismo, indico que su vida dio un giró cuando en 4º de medicina, a lo que sería un futuro traumatólogo, la vocación le sobrevino y esta se confirmó tras un tiempo de meditación. “La llamada de Dios me llevó a curar almas en vez de huesos”, decisión que según comentó, no sentó muy bien a su familia, y desconcertó a sus amigos y compañeros de universidad.

También comentó que la vida sacerdotal le ha aportado “confiar la vida a Dios”, “entregar su vida a Dios y ponerla en sus manos”, “descansar el alma en Dios”, también señaló algunas frases claves para emprender que considera relevantes y que él se ha aplicado en su vida diaria. La primera es de Jesús: “Sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo” (San Mateo 28,16-20) y hace referencia a sentirse siempre acompañado, la segunda es una frase, de San Pablo “Vence el mal a fuerza del bien”, añadió: porque es mejor pasarlo mal haciendo el bien, que pasarlo mal haciendo el mal, y es que Jesús nos dice, Yo os mando como ovejas en medio de lobos.

Monseñor Iceta, habló también de la importancia de trabajar y a la vez de confiar en Dios, ello lo explicó con una frase de Santa Teresa de Jesús “Haz lo que es en ti y déjame tú a Mí”, tú pon de tu parte, haz lo que puedas, que yo (Jesús) proveeré. Ejemplificó esta frase con el milagro de “el pan y los peces”, si el chico que había en ese momento no pone sus 5 panes y pocos peces, no hubiera sido posible la multiplicación de los panes y los peces, lo que propició la posibilidad del milagro. A este propósito escribe san Ignacio de Loyola: «Actúa como si todo dependiera de ti, sabiendo que en realidad todo depende de Dios» (cf. Pedro de Ribadeneira, Vida de san Ignacio de Loyola) y San Agustín dice: reza como si todo dependiera de Dios, trabaja como si todo dependiera de ti.

Monseñor Iceta añadió la importancia del amor, señaló que somos personas amadas incondicionalmente por Dios, pero necesitamos desarrollarnos en un entorno de amor, si uno no nace en un contexto amoroso, y vive en un entorno violento y de desamor es complicado entender el amor de Dios, para ello, él nos manda ángeles, porque es importante el acompañamiento en las personas, que no se sientan solas y que en alguna medida se sientan amadas, ya que solo se pueden sanar a las personas cuando otras personas les dedican tiempo, el hombre necesita el amor humano, sin este, no se puede vivir, estamos hechos para amar, señaló.

Don Mario Iceta, comentó a todas las madres asistentes que “nada construye más como persona que el tener, amar y cuidar a tu hijo” también regaló otras frases como “Tenemos cosas pero no nos tenemos a nosotros”, “la gente de hoy no vive, sobrevive”, “la fuente de la vida es Dios y los padres son los ministros de Dios para la vida”. Fue importante la reflexión que hizo el obispo sobre la importancia que le damos al PIB cuando la verdadera riqueza son los niños que nacen, no tanto lo material. 

Monseñor Iceta, añadió que “a las mujeres les diría que no estén solas, las cuestiones serias de la vida hay que compartirlas con quién te quiere, y deben confiar en la providencia de Dios, deben confiar en el amor, en el acompañamiento, y deben aceptar que la vida es dura, todos tenemos una cruz y la vida no es fácil, debemos pensar que Jesús nació en un lugar humilde como era el portal de Belén.

Dios nos dice que tiene un camino para nosotros, “para Jesús no hay no hay ninguna persona desahuciada”, igual no es el camino que nosotros queremos o hemos elegido, pero es el que El Señor ha dispuesto para nosotros”.

Sobre las leyes modernas, Monseñor Iceta, añadió en su charla que “no debemos confundir lo legal con lo moral”, ejemplificó esta frase con la ley de la eutanasia, “1.300 años de tradición en la medicina en la que los médicos estaban para ayudarnos a vivir y es algo que ahora se quiere revertir”, o pervertir ya que los médicos nunca estuvieron para ayudarnos a morir pervirtiéndomelo pensamiento hipocrático y provocando que los médicos se dedican ahora a “quitar la vida” .

Añadió que “En España estamos envejeciendo, tenemos una pirámide demográfica invertida, ¿Quién va a sostener las pensiones?” Ciertas leyes lo agravan todo. “Hay leyes pero no todas son morales”.

Como claves importantes para emprender comentó que la formación, sería la primera, y que virtudes como la fortaleza, espíritu de sacrificio y la capacidad de entrega, le siguen. Indicó que se puede empezar desde abajo y llegar a lo más alto, pero siempre debemos ser constantes y además entregar nuestra vida desde Jesús.

Monseñor Iceta alabó la importancia de dar y de darse, Dios nos da cosas importantes, como los hijos, un gran Don, el Don de la vida ya que el sufrimiento que padecemos los hombres no lo curan las cosas, lo cura el Amor. Afirmó que “lo que ha aprendido en su vida es que la vida se entrega a alguien”, no “a algo”. Monseñor Iceta dijo que él, es para Dios, porque la vida es para darse, la vida es para entregarla por tu hijo o para servir a los demás, por ello dijo Jesús que “hay más alegría en dar que en recibir”. 

También explicó que “la dificultad, puede ser el camino para comenzar otro camino, y siempre debemos comenzar el camino desde Dios”. Añadió que “es importante dejarnos ayudar, y ayudar”, el Señor nos pone alrededor personas que nos pueden ayudar y a las que todos podemos ayudar, acompañar, dar esperanza, ayudar a crecer, hasta los ancianos que están postrados en una silla de ruedas pueden rezar por el prójimo. Señalo la importancia de disfrutar de las cosas pequeñas y aconsejó nuevamente que dejemos descansar el alma en Dios, para poder coger fuerzas. 

Comentó en esta charla, que “lo que más le ha ayudado en la vida es ser optimista, confiar en Dios, tener esperanza, ilusión por las cosas, dijo que es importante no caer en la rutina, que debemos hacer de cada día algo distinto, ser constantes y pacientes, tener una rica vida interior, cultivar la Fe, rezar el Rosario, cuidar a los amigos, cultivar la amistad”. Insistió otra vez sobre la “importancia de darse a sí mismo más que dar cosas materiales, dar tu tiempo, tu compañía, valores, amabilidad, ayudar y dejarse ayudar, aconsejar y dejarse aconsejar por la gente que nos quiere”. Añadió asimismo, “que no debemos intentar cambiar la vida de los demás, debemos aceptarles como son, no como quisiéramos que fueran”.

Cuando se le preguntó a Monseñor Iceta que es lo que valoraría en las personas si tiene que contratarlas para un trabajo; aconsejó sobre la “importancia de causar una primera buena impresión, estar bien aseado, tener buena presencia, la sencillez de la persona, ser educado y saber estar, no dar muestras de afecto inapropiadas, saber presentarse, llevar las cosas preparadas, tener todo bien pensado valorando todos los escenarios de la entrevista, ser sinceros, naturales e inteligentes”.

“Debemos ser sencillos como palomas y astutos como serpientes” (Mateo 10:16-33 PDT). No debemos aparentar lo que no somos, debemos también hablar con calma, “más vale una palabra de menos que una de más”. Recalcó que “es importante tanto saber hablar como saber callar, también tener una buena postura”.

Don Mario habló sobre sus preferencias cuando se le preguntó y dijo que su color favorito era el azul, como el del manto de la Virgen y el del cielo de Burgos, donde actualmente ejerce su arzobispado, su flor favorita es la rosa, su árbol favorito el roble y el olivo, su planta el trigo y la vid (representan el pan y el vino) y como animal preferido, indicó el perro por su lealtad, fidelidad y amabilidad.

Una vez terminó su charla, las madres pudieron hacerle preguntas interesándose especialmente por un tema ¿Cómo perdonar? Y Monseñor Iceta explicó su importancia, letra que viene del latín, par donare, o sea «para dar», “volver a darse”. 

El Taller terminó con una joven madre de 15 años que le entregó un ramo de flores a Don Mario y dio un testimonio valiente de cómo “los médicos le decían que abortara porque su bebé venía con síndrome de down y como ella de manera valiente les dijo que era su hijo y que lo querría tal y como viniera, rezando a Dios todas la noches para que le diera la oportunidad de ser madre y que sanara a su hijo”. Cuando tuvo el bebé nació sano y los médicos decían que fue un milagro. Las madres presenten emocionadas aplaudieron largo rato. Al terminar el emotivo acto Don Mario bendijo a todos los asistentes y dejó las flores a los pies de un cuadro de la Virgen de Guadalupe donado y traído por una familia mejicana.