Este 5 de diciembre, Madrina inicia su campaña de “Mágica Navidad” para que “todo niño tenga derecho a jugar”.
Durante todas las Navidades, Madrina y sus voluntarios repartirán más de 4.000 regalos a niños en extrema pobreza de Madrid, Cañada Real, y pueblos de la España vaciada.
Este 5D, los menores recordaron a los niños muertos en la guerra de Ucrania rezando por ellos y manteniendo 1 minuto de silencio.
Un coro de 20 niños cantores ucranianos amenizaron la velada con famosos villancicos tradicionales del país eslavo.
La madrina del acto fue Anastasiia Tomazova, mujer del famoso futbolista ucraniano del Real Madrid, Andriy Lunin, un héroe para los niños de Ucrania.

Madrid, 7 de diciembre de 2023.– En la tarde noche del 5 de diciembre, festividad de San Nicolás, Madrina ha celebrado un emotivo acto navideño con 250 niños ucranianos, coincidiendo con una vieja tradición eslava que se remonta al siglo IV. Según esta tradición, los menores dejan sus zapatos vacíos al lado de la chimenea o de la ventana, y en la mañana del 6 de diciembre, San Nicolás los llena de regalos. Esta tradición, que también se celebra en otras partes del mundo, es una forma de celebrar la Navidad en Ucrania y de inculcar en los niños los valores de la generosidad y el amor por los demás.
Este 5 de diciembre, Madrina inicia su campaña de “Mágica Navidad” para que “todo niño tenga derecho a jugar”. Durante todas las Navidades, Madrina y sus voluntarios repartirán más de 4.000 regalos a niños en extrema pobreza de Madrid, Cañada Real, y pueblos de la España vaciada.
Para esta ocasión, más de 250 niños ucranianos menores de 14 años se dieron cita en la explanada del Banco del Bebe de la Fundación Madrina, donde recibieron caramelos y regalos de manos de San Nicolás y de sus ángeles.
En la explanada del Banco del Bebé de la Fundación Madrina, centenares de caras alegres se iluminaron en esta velada con San Nicolás y sus ángeles que, según la tradición ucraniana, es un santo obispo cristiano que es conocido por su generosidad y su amor por los niños, siendo conocido como “protector de los niños”, ya que en vida entregaba regalos a los menores más pobres, salvando a algunos niños de la esclavitud.
El emotivo evento, que se inició con un rezo y 1 minuto de silencio por los niños víctimas de la guerra, da inicio a la campaña de “Mágica Navidad” de la Fundación Madrina. En esta ocasión, para la entrega de regalos de San Nicolás se contó con la actuación de un precioso Coro de niños cantores ucranianos que interpretaron villancicos de la tradición eslava y que deleitaron a los niños y padres presentes.
También se unió a la gala la presencia de Anastasiia Tomazova, mujer del famoso futbolista ucraniano del Real Madrid, Andriy Lunin, un héroe para los niños, y que entregó dos camisetas firmadas por el jugador para su sorteo entre los más jóvenes.



San Nicolás y sus ángeles no pararon de repartir caramelos durante la entrega de regalos y juguetes. Al final del acto madres y niños dieron su agradecimiento a los voluntarios de la Fundación Madrina.
CELEBRAMOS TAMBIÉN EL DIA DEL VOLUNTARIO

Este año, la Fundación Madrina agradece la labor social del voluntario en la celebración del Día Internacional del Voluntariado, valorando su rol como árbitros de la desigualdad social.

En este sentido, Madrina ha rendido homenaje a todos los voluntarios que, con su generosidad y compromiso, dedican su tiempo y esfuerzo a ayudar a los demás sin esperar nada a cambio, incluso ofreciendo su propia vida. En esta fecha tan especial, la entidad ha querido reconocer también la labor social de los más de 2.500 voluntarios que han contribuido con su trabajo en la Fundación a sacar de la extrema pobreza a miles de niños y madres, a través de los diferentes programas de su obra social.
En este día ha entregado a los voluntarios un diploma acreditativo de su compromiso social y su entrega generosa para con la sociedad, escuchando algunos de sus testimonios. El acto se llevó a cabo en el banco del Bebé de la Fundación, siendo ovacionados por cerca de 250 madres y niños que se encontraban esperando a su reparto de alimentos en las “colas del hambre” en la explanada de Plaza de San Amaro.
Desde la creación de la entidad, en el año 2.000, la dedicación de los voluntarios ha hecho posible que la obra social de la Fundación Madrina, pueda ofrecer ayuda de emergencia y acompañamiento a niños y madres en situación vulnerable, todas ellas víctimas de violencia, abandono, abuso, trata, desigualdad social, o afectadas por la guerra y catástrofes naturales.
El valor de los voluntarios de la Fundación se aprecia en que distribuyen esta ayuda a niños y madres en extrema pobreza, a través de más de un centenar de programas de alimentación e higiene “materno-infantil”, de atención sanitaria en pediatría y ginecología, de alojamiento en pisos, residencias, hogares de acogida y de realojamiento en zonas del entorno rural, así como de formación en empleo y emprendimiento. Asimismo, y desde el año 2020, Madrina desarrolla a través de voluntarios, labores de Cooperación Internacional y de Emergencia Humanitaria en países como Ucrania, entre otros.
